Proceso Terapéutico
  • A partir de los 4 años de edad en adelnate se intenta realizar el Test de Escucha. Esta primera valoración apoya al consultor en la definición del tratamiento a seguir.

    ¿Qué evalúa el Test de Escucha?

    Evalúa la escucha que es diferente a la audición. Oír es una sensación: es la respuesta a la estimulación de un sonido. Corresponde a una función fisiológica.

    Escuchar es una función cognitiva: es la capacidad de usar el oído de manera intencionada, atenta y emocionalmente aceptable, con el objetivo de comunicar, ejecutar o aprender algo.

    Por medio de la evaluación se podrá determinar cómo es la dinámica de escucha de la persona. Cómo es la percepción de su esquema corporal, cuál es el nivel de uso de su inteligencia motora. También se podrá evaluar su nivel de concentración para poder seguir las ideas en una tarea o en una conversación con múltiples distractores externos. Así mismo se podrá determinar cual es el balance entre su pensamiento racional y su pensamiento emocional.

    Dentro de estos aspectos a evaluar está el nivel de motivación y energía en el que se encuentra la persona, cómo es su adaptación social, su manejo de la ansiedad, su nivel de comunicación y su función ejecutiva.

    En resumen se busca evaluar el nivel de integración acústica del sonido, ya que este influye directamente en el desempeño familiar, social y laboral de cada persona.

  • A continuación se realiza una entrevista con un Consultor Certificado del Método TOMATIS®, en la cual se explicarán los datos encontrados en el Test de Escucha y se aclararán las posibles dudas que se tengan antes de iniciar el proceso de Entrenamiento de la Escucha con el Método TOMATIS®. Con esta información el Consultor elabora la Programación Personalizada de Escucha que guiará el tratamiento.

  • En esta primera fase la persona deberá hacer la escucha de su Programación Personalizada con el Oído Electrónico, de una a dos horas diarias durante 2 a 3 semanas dependiendo de lo que se determine en la entrevista inicial. El objetivo es estimular el oído y el cerebro en función de las necesidades particulares, por tal motivo las sesiones solo deben parar durante el fin de semana.

    Una vez finalizadas las primeras semanas de tratamiento, inicia el primer periodo de reposo o de "integración" de la estimulación neuro-sensorial, el cual es necesario para el proceso y se lleva acabo antes de iniciar la segunda fase de Escucha. Este período de descanso varía individualmente; usualmente es de 4 a 8 semanas. Antes de iniciar cada nueva fase se hace Test de Escucha y entrevista con un Consultor TOMATIS® para evaluar la evolución del tratamiento.

  • Cada una de estas fases tendrá una duración de 5 a 15 días de acuerdo con las necesidades individuales del proceso terapéutico. Entre cada una de las fases habrá un periodo de integración que varía individualmente; usualmente es de 4 a 8 semanas de descanso. En estas fases, las sesiones pueden complementarse con ejercicios audiovocales. El uso de la voz propia atraves de un micrófono que instantáneamente modifica y retransmite la propia voz según los parámetros específicos del Efecto TOMATIS®.

    Usted podrá escuchar en directo su voz corregida y modulada al repetir frases y palabras del idioma que este ejercitando o el material que requiera su Programación Personalizada de Escucha, incluyendo la producción de sonidos tratándose de niños pequeños, lo que estimula la comunicación.

  • Al terminar las cada fases anteriormente descritas se realiza una entrevista final. Este balance permite al participante recibir información detallada de sus fortalezas, progresos y cambios obtenidos en su escucha, además de determinar si es recomendable o no llevar acabo nuevas sesiones. Los resultados obtenidos con el Método TOMATIS® son duraderos.

    La mayor parte de las veces no es necesario prolongar las sesiones más allá del periodo inicial. Sin embargo, en algunas ocasiones, se recomienda hacer refuerzos posteriores.